Para la mujer de Boaco.
A ti Boaqueña. Que bonita la boaqueña, que en la plaza se pasea, echa un ojo hacia la iglesia y a Santiago lo festeja. Muy temprano me levanto y en los tiempos de neblina, veo en pausa avanzar a la madre que camina, de la planta a la oficina, a cumplir con su jornal para su hijo alimentar. La boaqueña en la cocina se apresura al cocinar, aunque tenga que salir a la acera a conseguir la verdura que le falta para su misión cumplir, Las campanas de la iglesia nos invitan a almorzar y cuando avanzas en aceras es muy común escuchar el sonido de cubiertos en los platos de almorzar, Que bonita la boaqueña, que en la plaza se pasea, echa un ojo hacia la iglesia y a Santiago lo festeja. Por las tardes calurosas hacia el río hay que marchar, La Sirena o Mamá Rosa son de las mejores pozas donde vas a retozar. En tu viaje hacia esas pozas nunca dejarás de ver a una que otra boaqueñita que en una piedra se esmera por que hay ropa que lavar, Que bonita la boaqueña, que en la plaza se pas